Ayer encontré rastros de una babosa (o sea, baba) en la alfombrilla de la entrada trasera a la casa (desde el jardín a la cocina). Pensé que me estaba obsesionando y que sería cualquier otra cosa. Pero me volví a agachar para observarlos detenidamente. No había duda: era rastro babosil. Ojeando alrededor descubrí a la babosa allanadora de morada en el rincón de la puerta intentando trepar por la pared. Eso ya era demasiado. Vale que ellas se tienen que buscar la vida en su hábitat (que podían comerse las malas hierbas en lugar de las flores y serían mucho más apreciadas), pero entrar en casa pasa de castaño oscuro (por cierto, yo me he oscurecido un poco el pelo a castaño claro). El sábado había comprado una trampa para caracoles y babosas en la ferretería del barrio. Como ha estado lloviendo todo el fin de semana (la lluvia ha esperado todo el año para caer de forma seguida las últimas semanas), no he puesto la trampa. Pero de mañana no pasa. Yo mostré mi incredulidad al tendero respecto a la eficacia exterminadora de tan simple objeto, pero dijo que funcionaba (qué iba a decir...). El caso es que en la ferretería no quedaba ni un paquete de bolitas antibabosas (mis vecinos tienen que haber acabado con las reservas) y solo uno de estos artilugios. Así que me lo llevé. Las instrucciones indican que se llene con 1/2 litro de agua con dos cucharaditas de sal o sustituir el agua por cerveza. Dado que son babosas inglesas, por supuesto que llevaré a cabo la sustitución. Para mí que mis babosas todoterreno entran y salen de la trampa como si nada. Pero bueno, ya os contaré si funciona el invento. Se supone que caben hasta 50 individuos. No me preguntéis como pienso vaciarla porque aún no me quiero hacer a la idea.
Por cierto, la planta número tres ya ha sido devorada en su totalidad:
9 comentarios:
Menudo trabajo te están dando las babosas!! Seguro que tiene que haber plantas que ahuyenten a las babosas.
Por cierto, y cambiando de tema, me gusta el nuevo look del blog.
Pues no se por que pero a veces no sale la letra que he seleccionado para los titulos de las entradas y los links laterales... No es comic, vosotros veis otra diferente?
Madre mia! yo quiero saber cómo termina la saga de las babosas! que invasión!
Esas no te sirven para hacer experimentos en el laboratorio? :)
Ni que decir tiene que en Córdoba el mes de Mayo y Junio son famosos por su peculiar costumbre de cuando la noche empieza a caer el ser Humano natural de Córdoba o adoptado, se dirijen en tropel a deborar ese estupendo manjar llamados "cabrillas" o caracoles en caldo acompañado siempre de un suculento zumo de cebada a ser posible Cruzcampo, con lo cual aqui creo que los deborarian pronto.
PD:
Adjunto enlace de foto para que lo veais, por cierto Esther los hace buenisimos
http://90plan.ovh.net/~teselas/mikechapel/wp-content/uploads/2007/03/caracoles%202.miniatura.jpg
Ánimo, Sara, que yo ya vislumbro el final de la pesadilla babosil!! Yo creo que en vez de cerveza podrías poner algo de más graduación alcohólica, no sé whisky o algo así, para asegurarte que así la borrachera les impida salir de la trampa :D
ánimo!! un beso
Por favor, vistos tus posts anteriores, no se te ocurra desacerte de ellas con la pira que gastaste para la primera. Te tirarán del pais por sádica. Mejor las congelas como las manduca del laboratorio
He seguido quemando... Antes de poner la trampa intente matar a cinco chafandolas con piedras y otras cinco en una pira comunitaria. Se que alguna se salvo de tanto de una muerte como de otra. Pero desde luego que la falla babosil era menos asquerosa que el chafamiento con piedras (y eso que el olor a babosa requemado no es muy agradable).
Pero desde luego que en mi congelador no entran!
Y de comermelas ni hablamos!!! Ni con salsa ni con nada!
De momento la trampa con agua y sal (solo habia que anyadir un poco de cerveza, no toda, y no habia ninguna abierta) no tiene ningun especimen...
Y cómo va la guerra antibabosil...?
Manoli
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